El 29 y 30 de enero de 2024, el Consejo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) se reunió para discutir la aceptación de la invitación realizada el 25 de enero de 2022 a la República Argentina para unirse a dicha organización.
Recordemos los pasos a seguir para poder unirse a la OCDE:
En primer lugar, el país en cuestión acepta la invitación y, a partir de que la OCDE discute la aceptación de la invitación, se inicia un proceso de entre 4 y 6 meses de negociación para establecer la hoja de ruta del proceso de ingreso, con los términos y condiciones del proceso de acceso.
Una vez esté acordada la hoja de ruta, el país será evaluado en los 23 Comités Técnicos de la OCDE y recibirá devoluciones de estos sobre cambios a realizar en las políticas, legislación y prácticas del país. El objetivo es buscar estandarizar al país, en 23 áreas centrales, al resto de los países que integran la organización.
Luego de esta etapa, que llevará años, el Consejo llama a votación de los 38 países miembros para decidir si aprobar o no la membresía. Según la consulta que realizó Radar Internacional, en el caso de Argentina, el plazo realista para finalizar el proceso será de 6 años.
Volviendo al caso argentino, entonces, la próxima fase implica la negociación y creación de la Hoja de Ruta para el proceso de acceso de la República Argentina. Este documento será elaborado por la Secretaría de la OCDE y requerirá la aprobación del Consejo.
Se espera que la Hoja de Ruta sea presentada en la reunión del Consejo de la OCDE en París, programada para mayo. La Canciller Diana Mondino se anticipa a asistir a esta reunión, marcando un hito significativo para la República Argentina en su esfuerzo por consolidar su posición en el ámbito internacional y en el sistema multilateral de normas.
Vale recordar que ingresar a la OCDE beneficia a Argentina al generar confianza en mercados internacionales, reducir costos de capital, proporcionar acceso a apoyo técnico y permitir participación en la creación de reglas globales de comercio y economía. Estas ventajas pueden mejorar significativamente la imagen internacional y el rendimiento financiero del país.