El presidente Javier Milei mantuvo una reunión este viernes en la Casa Rosada con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken. El encuentro fue descrito como «increíblemente positivo» por parte del funcionario estadounidense, quien resaltó el «potencial extraordinario» de Argentina y expresó su respaldo al plan de estabilización de la economía nacional.
La reunión tuvo lugar en el salón Eva Perón de la Casa Rosada y se extendió por más de dos horas, en el marco de la visita de dos días que Blinken realizó a Argentina para fortalecer las relaciones bilaterales. Tras el encuentro, el presidente y Blinken se dirigieron a los históricos balcones de la sede gubernamental para observar la Plaza de Mayo, acompañados por parte del Gabinete nacional y la delegación extranjera.
Después, Blinken emitió una declaración y ofreció una conferencia de prensa junto a la canciller Diana Mondino, también en la Casa Rosada. Durante este encuentro, resaltaron el potencial de la relación bilateral, especialmente en términos comerciales y de política internacional, aspectos de interés compartido entre ambos países.
Aunque no se realizaron anuncios específicos, se hicieron alusiones a la capacidad de Argentina para suministrar alimentos y litio a nivel mundial, aspectos que resultan atractivos para los inversores estadounidenses.
Resaltó la reunión con el Presidente al expresar que «el encuentro fue altamente productivo. Aprecio enormemente el tiempo dedicado por el Presidente y la profundidad de nuestras conversaciones. Esto refleja el interés de Estados Unidos en fortalecer los lazos».
Adicionalmente, explicó que uno de los temas tratados fue «cómo incrementar tanto el comercio como la inversión» entre ambas naciones, dado que «percibimos un potencial excepcional y aspiramos a que las compañías estadounidenses continúen siendo el socio preferente de Argentina».
Mondino expresó su agradecimiento público al «compromiso» de Estados Unidos por «comprender los significativos cambios» que están «teniendo lugar en Argentina». Además, resaltó los «valores compartidos» entre ambas naciones, especialmente en lo que respecta a la «democracia y la libertad».
El secretario de Estado estadounidense destacó la «profundidad» de la conversación, centrándose en la situación económica de Argentina: «Pueden contar con nosotros mientras trabajan para estabilizar su economía, proteger y elevar a cada sector de su sociedad, mejorar el clima empresarial y eliminar obstáculos a las inversiones que generan empleo».
Blinken eludió respaldar abiertamente la posibilidad de dolarizar la economía argentina al afirmar que «eso depende» de una decisión interna de Argentina, y que Estados Unidos «espera recibir algún plan y discutirlo en mayor detalle».
Asimismo, expresó su respaldo al acuerdo entre Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI), señalando que esta institución multilateral «puede desempeñar un papel crucial en la promoción de la estabilización económica». Sin embargo, optó por no responder a las preguntas de la prensa sobre posibles nuevos desembolsos.
Mondino resaltó la armonía con Washington evidenciada en la visita del secretario Blinken, subrayando que esta cooperación se prolongará con la llegada de varios funcionarios en los próximos meses. Entre ellos, mencionó la visita en abril de Laura Richardson, la jefa del Comando Sur de Estados Unidos. La canciller explicó que estas visitas se han enfocado en comprender la mejor manera de trabajar juntos y, sobre todo, cómo Argentina puede alcanzar sus objetivos. Además, destacó que llevaba un pin en su blazer con la inscripción «Bring them home», en referencia al llamado mundial por la liberación de las personas que están en poder de la organización palestina Hamas desde octubre.
Tanto Mondino como el funcionario estadounidense recibieron preguntas sobre la posibilidad de que el presidente Milei se reúna en las próximas horas con el exmandatario y aspirante a la candidatura republicana, Donald Trump. Sin embargo, ambos optaron por resaltar la profundidad de la relación actual entre los dos gobiernos.