El mercado norteamericano está atravesando una situación particular. A la espera de que la Reserva Federal (FED) baje las tasas de interés, se teme ante la posibilidad de una recesión. Sumado a esto, el banco central de Japón, el lunes pasado, inesperadamente, decidió subir sus tasas sembrando un flujo negativo hacia los mercados. La combinación de ambos problemas genero una semana muy turbulenta, donde el VIX (el índice de volatilidad del S&P 500) toco máximos a los que no llegaba desde marzo de 2023.
Finalmente, el mercado parecería estar estabilizándose. El VIX bajo considerablemente y hoy, lunes 12/08, los mercados abren paralelos, sin grandes movimientos.
A la espera de los datos de inflación:
Los analistas están a la espera de datos clave que saldrán esta semana. Entre ellos se encuentran, este martes, la inflación de precios al productor (PPI) y el plato fuerte llegara el miércoles con el índice de precios al consumidor (CPI). Se espera que el PPI venga en torno al 0,1% y el CPI cercano al 0,2% mensual. Recordemos que, luego de un primer trimestre complicado, Estados Unidos viene en una tendencia bajista con respecto a la inflación. Se estima que la inflación anual sea de 2,9%.
De confirmarse lo que los analistas esperan, le llevaría certezas al mercado. La inflación se estaría comportando dentro de lo esperado y comenzaría a converger al número deseado de la Reserva Federal. Esto supondría que ya no habría ningún tipo de problema para que la FED comience con la bajada de las tasas de interés en septiembre. De ser mayor a lo esperado, dependiendo la magnitud, transmitiría duda e intranquilidad. Significaría que la inflación podría no estar del todo controlada como se suponía.
Recordemos que la Reserva Federal de los Estados Unidos actúa bajo un mandato dual, lo que significa que su objetivo está en mantener la inflación en torno al 2% y no debilitar, por demás, el mercado laboral.
En el último mes el desempleo paso, inesperadamente, del 4,1% al 4,3% y viene en una tendencia alcista desde julio del año pasado cuando el desempleo era del 3,5%. Sumado a esto, se esperaba que el empleo no agrícola agregue 175.000 empleados nuevos a la economía en el último mes. Sin embargo, se agregaron únicamente 114.000 empleados.
Como resultado, las probabilidades muestran que, más allá de como vengan los datos de inflación, la Reserva Federal comenzará la bajada de tasas de interés en septiembre. Fundamentalmente gracias al enfriamiento del mercado laboral y al temor a una recesión. Por esta razon, ahora es importante comenzar a preguntarse ¿Cuánto lo hará? ¿Cuál será el camino por seguir luego de septiembre? La inflación de julio será un dato vital para comenzar a contestarse estas preguntas y nos permitirá tener un panorama más claro de cómo será la política monetaria de los Estados Unidos en los próximos meses.