Finlandia ha abandonado cada vez más lejos de su antigua posición de neutralidad, esta vez avanzando certeramente en negociaciones con Estados Unidos para lograr un acuerdo de cooperación en materia de defensa. Recordemos que Finlandia se unió a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en abril de este año, y hoy avanza en la profundización de la alianza, prendiendo algunas alarmas en Rusia y aumentando la presencia occidental en la región.
La idea del acuerdo de defensa con Estados Unidos surgió luego de un encuentro entre el presidente de Finlandia, Sauli Niinistö, y su homólogo norteamericano, Joe Biden, en marzo del 2022, justo después de la invasión rusa a Ucrania. En aquel entonces, ambos países iniciaron negociaciones que hoy están más cerca de concretarse. Gracias a ello, el temor de Vladimir Putin, presidente de Rusia, del establecimiento de fuerzas militares norteamericanas en Finlandia, finalmente está cerca de hacerse realidad.
De concretarse, se trataría de la primera vez que Finlandia acepta fuerzas militares extranjeras por extensos períodos en tiempos de paz, puesto que el acuerdo significaría la llegada de tropas estadounidenses al país para realizar ejercicios militares. De este modo, Estados Unidos obtendría acceso a instalaciones para un entrenamiento conjunto, a un vasto depósito de armamento y a diferentes equipos bélicos, incluyendo además el uso de aeropuertos, puertos y zonas designadas.
El jefe del departamento político de la cancillería de Finlandia y encargado de la negociación del acuerdo, Mikael Antell, comunicó que el acuerdo «permite la colaboración con los Estados Unidos en todas las circunstancias. Consecuentemente, fortalece significativamente la seguridad y defensa de Finlandia«.
Una de las condiciones impuestas por Finlandia para la concreción del acuerdo es la prohibición del establecimiento de armas nucleares y de minas terrestres. Además, el acuerdo prevé cláusulas sobre otras temáticas, como son exenciones aduaneras y fiscales para ciertos bienes.
Sin embargo, aunque cerca, todavía queda un largo camino por recorrer para lograr la efectiva aplicación del acuerdo. Se espera que las negociaciones concluyan a principios del año que viene, luego de que el Parlamento de Finlandia decida o no su aprobación.
Para Finlandia, este representaría la oportunidad de recibir asistencia en caso de necesidad. Su proximidad a la Federación Rusa lo transforma en un objetivo de mayor riesgo. Cabe resaltar que, ahora, al ser parte de la OTAN, Finlandia cuenta con mayores y mejores herramientas de defensa frente a las amenazas que provienen de su frontera este.
De esta manera, el país nórdico podría aumentar su seguridad mediante la concreción del acuerdo, aunque al mismo tiempo despertaría mayor enojo por parte de Rusia. Además, se profundizarían los llamados de atención para que Finlandia mantenga su soberanía y no sea utilizado para llevar a cabo agendas de otras naciones a expensas de la estabilidad del país.
Según ha alegado Putin en reiteradas ocasiones, Rusia emprendió la invasión de Ucrania, entre otras causas, debido a la expansión de la OTAN hacia su «patio trasero«. Sin embargo, como se puede ver, la invasión ha generado un efecto contrario al deseado por Putin. Debido a la amenaza que el gigante euroasiático representa para sus países vecinos, estos se ven motivados a acudir a Estados Unidos para su defensa. Por ello, países que antes mantenían una política de no alineamiento a la OTAN, hoy la han abandonado.
Por su parte, para Estados Unidos, la importancia de asegurar su presencia en Finlandia se debe, en gran parte, a la frontera de 1.340 kilómetros que comparte con Rusia. Además, el país nórdico cuenta con una fuerza militar de gran capacidad en comparación con algunos de sus homólogos europeos.
Concretamente, el país cuenta con uno de los arsenales de artillería más fuertes del continente. Según el índice Global Firepower, Finlandia se encuentra en el puesto 51 entre los países más poderosos militarmente en el mundo. De este modo, Estados Unidos no solo se beneficia de la cercanía finlandesa a Rusia, sino también del acceso a una importante fuente militar en la región.
El establecimiento de las tropas norteamericanas en Finlandia es parte de un proceso más grande de expansión por Europa del Norte. Noruega ya ha concretado un acuerdo similar con Estados Unidos, mientras que Suecia y Dinamarca están en proceso de firmar sus propios acuerdos con la potencia occidental. De este modo, Estados Unidos obtiene asentamiento lugares estratégicos cerca de uno de sus mayores enemigos actuales.