El gobierno minoritario del Primer Ministro Michel Barnier comienza a tambalearse luego de que utilizara poderes especiales para impulsar un proyecto de ley de presupuesto de seguridad social, sin la aprobación de los miembros del Parlamento. A raíz de esta decisión, el Nuevo Frente Popular (NFP), de izquierda, y el Agrupamiento Nacional (RN), de Marine Le Pen, impulsaron una moción de censura contra Barnier.

Seguidamente, el partido Francia inquebrantable (LFI), catalogado como de extrema izquierda, anunció que apoyaría la moción. De este modo, el Primer Ministro se encuentra en una posición sumamente compleja. Según señalaron numerosos medios europeos, es poco probable que su gobierno minoritario sobreviva la votación. Por su parte, Barnier advirtió que si pierde su cargo hoy, la situación económica y social de Francia empeorará.

La moción de censura fue impulsada luego de que el Primer Ministro hiciera uso del artículo 49.3 de la Constitución, que le permite al gobierno forzar la aprobación de un proyecto de ley en la Asamblea, sin necesidad de votación. Pero este instrumento puede ser anulado si los parlamentarios aprueban una moción de censura contra el gobierno, destituyendo de ese modo al Primer Ministro.

Al margen de la moción de censura, y en línea con las advertencias de Barnier, de no aprobarse el presupuesto para el ejercicio fiscal de 2025, se necesitarán medidas de emergencia para afrontar los gastos financieros del Estado y garantizar la solvencia del país. En tanto, si la moción se aprueba, cuestión que será definida en un par de horas, Michel Barnier se convertirá en el Primer Ministro con menos tiempo en el cargo.