Hamas ha propuesto un alto el fuego en la Franja de Gaza de cuatro meses y medio, durante los cuales todos los rehenes quedarían libres, Israel retiraría sus tropas de la Franja de Gaza y se esperaría alcanzar un acuerdo que ponga fin a la guerra definitivamente.
La propuesta del grupo islamista palestino tiene lugar poco tiempo después de que Qatar y Egipto, luego de la aprobación de Israel y Estados Unidos, enviarán una oferta de cese al fuego en la Franja. Ezzat El-Reshiq, miembro de la oficina política de Hamás, confirmó que la oferta de Hamás había sido transmitida a través de Egipto y Qatar a Israel y Estados Unidos.
El Canal 13 de Israel citó a un alto funcionario del Estado judío diciendo que algunas de las demandas presentadas por Hamas no eran aceptables para Israel. Por ello, acorde al canal televisivo israelí, las autoridades del país se encuentran debatiendo si rechazar de la propuesta de Hamas o si negociar condiciones alternativas.
Finalmente, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha rechazado la propuesta de cese al fuego de Hamas, prometiendo que irá en búsqueda de una “victoria completa y decisiva” contra el grupo palestino catalogado como terrorista por Israel y las potencias occidentales.
Según un documento de la propuesta citado por la agencia internacional de noticias Reuters, Hamás no exige una garantía de un alto el fuego permanente desde el principio, sino que el fin de la guerra tendría que acordarse al final del proceso de liberación de rehenes y prisioneros. Asimismo, Hamas estaría buscando que Qatar, Egipto y otras naciones de la región garanticen que el alto el fuego se mantendrá y no colapsará tan pronto como los rehenes sean liberados.
Según el documento, durante la primera fase, de 45 días de duración, todas las mujeres, los hombres menores de 19 años y los ancianos y enfermos retenidos como rehenes serían liberados, a cambio de la liberación de mujeres y niños palestinos detenidos en cárceles israelíes. A su vez, Israel debería retirar sus tropas de las zonas pobladas.
La segunda fase, que incluiría la liberación de los hombres retenidos como rehenes y la retirada total de Israel de toda la Franja de Gaza, no sería comenzaría hasta que las partes concluyan “conversaciones indirectas sobre los requisitos necesarios para poner fin a las operaciones militares mutuas y retomar la calma completa“.
Finalmente, los cuerpos y restos de los fallecidos serían intercambiados durante la tercera fase. Al final de esta, Hamás espera que las partes hayan llegado a un acuerdo sobre el fin de la guerra.
Por otro parte, según informó The Times of Israel, el informe también incluía las siguientes cláusulas:
- Bajo el paraguas de Hamas, los habitantes de Gaza tendrían libertad de movimiento, incluidos los enfermos y heridos a través de Rafah hacia Egipto.
- Ingresaría equipo pesado en la Franja para la remoción de escombros.
- Se reemplazarían equipos del Ministerio de Salud y de Defensa Civil.
- Se reconstruirían los hospitales.
- Se suministrarían al menos 60.000 viviendas temporales, así como 200.000 carpas.
- Se iniciaría la reconstrucción de las redes de agua, electricidad y comunicaciones.
- Se elaboraría un plan para la reconstrucción de viviendas, establecimientos económicos e instalaciones públicas, el cual no debería durar más de tres años.
- Se reanudaría el suministro de combustible a Gaza.
- Israel se comprometería a reanudar el suministro de electricidad y agua.
- Se reanudarían los servicios humanitarios de las organizaciones internacionales.
Estas cláusulas, sin embargo, no han sido confirmadas ni chequeadas por Reuters.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, quien llegó a Israel ayer por la noche después de reunirse con los líderes de Qatar, Egipto y Arabia Saudita, se reunió con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, para discutir la propuesta.
“Trabajaremos tan duro como podamos para tratar de llegar a un acuerdo para que podamos avanzar, no solo con un acuerdo renovado sino ampliado sobre los rehenes, y todos los beneficios que eso traería consigo“, dijo Blinken en una conferencia de prensa en Doha el martes por la noche.
Por su parte, Arabia Saudita ha asegurado a Estados Unidos que no establecerá relaciones diplomáticas con Israel a menos que se reconozca un Estado palestino con las fronteras de 1967 y con Jerusalén Este como su capital, dijo el miércoles el Ministerio de Relaciones Exteriores del reino.
El comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores saudita, además, reiteró “su llamamiento a los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU que aún no han reconocido al Estado palestino, para que aceleren el reconocimiento del Estado palestino en las fronteras de 1967, con Jerusalén Este como su capital“. El comunicado agregó que la “agresión israelí” contra la Franja de Gaza también debe cesar y que las fuerzas israelíes deben retirarse del territorio.
Por su parte, Antony Blinken añadió que el príncipe heredero saudita, Mohammed bin Salman, había “reiterado el fuerte interés de Arabia Saudita en perseguir” la normalización cuando se reunieron esta semana. “Pero también dejó claro lo que me había dicho antes, que es que para hacer eso se requieren dos cosas: el fin del conflicto en Gaza y un camino claro, creíble y con plazos concretos para el establecimiento de un Estado palestino“, sentenció Blinken.