El Orden Mundial publicó nuevos datos acerca de la financiación militar extranjera de Estados Unidos desde el año 2000 hasta 2022. “La gran potencia global reparte todos los años miles de millones de dólares en subsidios y ayuda militar”, resaltó el medio comúnmente conocido por sus mapas, gráficos y artículos de análisis sobre geopolítica y asuntos internacionales. De todos los países que reciben estas ayudas, “Israel es el principal destinatario”.
La ayuda militar a países extranjeros se ha convertido en una parte importante de la estrategia diplomática de Estados Unidos y su Agencia para la Cooperación para la Seguridad de la Defensa (DSCA, por sus siglas en inglés). “Fundada a comienzos de los años setenta en pleno contexto de la Guerra Fría, este organismo dependiente del poderoso Departamento de Defensa ha sido uno de los principales instrumentos de la primera potencia mundial para extender su influencia por decenas de países en forma de ayuda y financiación militar”, resalta EOM.
En total, en el período 2000-2022, “la DSCA ha invertido alrededor de 124.000 millones de dólares en préstamos y subsidios para comprar bienes y servicios estadounidenses a países extranjeros”, informa EOM, lo cual equivale al 14% del gasto en Defensa actual del Estado norteamericano.
Esto debe entenderse en el contexto de “Guerra contra el Terror” lanzada por al presidente de George H. Bush hijo, tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, lo cual supuso las invasiones tanto de Afganistán, en 2001, como de Irak, en 2003. Años más tarde, la presencia estadounidense se expandió también a Siria.
En los últimos años, sin embargo, los esfuerzos norteamericanos se han concentrado en la región de Asia Pacífico, debido a la creciente amenaza que presenta la República Popular de China para la región y para la hegemonía estadounidense.
De acuerdo con los datos recopilados por el Center for International Policy, organización no gubernamental con sede en Washington, Medio Oriente y Asia Central son, de hecho, dos de las regiones donde más se concentra el Programa de Financiación Militar Extranjera (FMF, por sus siglas en inglés) del gobierno norteamericano.
En este sentido, el principal receptor de las ayudas del programa de ayuda militar mencionado aunque es, por mucho, Israel. Concretamente, el Estado judío, enclavado en una región árabe-musulmana ha recibido más de la mitad de la financiación militar que Estados Unidos ha enviado al extranjero durante los últimos 22 años, superando los 64.000 millones de dólares.
Egipto (24%), Jordania (6%), Pakistán (3%) e Irak (3%) son los que le siguen a Israel entre los países que más ayuda militar reciben desde Washington, además de otros como Líbano, Afganistán, Colombia o Ucrania.
El dinero que destina el Departamento de Defensa para su programa de financiación militar extranjera actúa también como una herramienta muy útil para seguir alimentando la potente industria militar norteamericana. En este sentido, tres cuartos de la ayuda militar que recibe Israel de Estados Unidos vuelven al país en forma de compra de armas. “Es el negocio de la guerra revestido de cooperación en seguridad y convertido en una potente herramienta geopolítica y diplomática”, expresó EOM.
Cabe resaltarse que el análisis efectuado por EOM no incluye las ayudas militares a Ucrania en el marco de programas específicos desde comenzada la invasión rusa de territorio ucraniano. Por ello, “si tenemos en cuenta toda la ayuda militar más allá de la compra de armas, desde el comienzo de la invasión rusa, Estados Unidos ha destinado más de 44.000 millones de dólares en asistencia militar a Kiev, un récord histórico si se tiene en cuenta el reducido periodo de tiempo en el que se ha producido”, señala EOM.
Entre otras partidas, a la inversión en concepto de ayuda militar extrajera, que en 2021 destinó 115 millones de dólares a Ucrania, se han sumado varios paquetes suplementarios con cargo al FMF y envíos de armas gestionados directamente por el presidente Joe Biden a través de las reservas oficiales del país, lo que supone un tercio de la ayuda total. También, se han llevado a cabo aportes a través de la Iniciativa de Asistencia para la Seguridad de Ucrania, creada en 2016 para brindar apoyo armamentístico y logístico a Kiev.
Esto resalta el hecho de que, dentro de la Agencia para la Cooperación para la Seguridad de la Defensa, el FMF no es el único programa de ‘cooperación’ estadounidense. Cabe mencionar también el programa de Ventas Militares al Extranjero y el programa de Educación y Entrenamiento Militar Internacional.