El Ministerio de Defensa de Israel anunció una ampliación de su orden de compra de los aviones caza F-35, sumando 25 unidades adicionales. De esta forma una vez completado el nuevo contrato, Israel contará con 75 unidades del más moderno caza del mundo de quinta generación. La nueva adquisición a la firma Lockheed Martin se concretará en entregas de entre 2 y 5 aeronaves hasta 2028. Cabe destacar que del contrato original de Israel, solo han llegado 39 unidades de las 50 pactadas.
El nuevo encargo consolida el proceso de modernización de la Fuerza Aérea de Israel, en un momento muy particular en el que el país se encuentra inmerso en una guerra en Gaza, enfrenta crecientes escaramuzas contra el grupo Hezbollah del Líbano y la posibilidad de un conflicto regional más amplio con Irán. Israel es el único país del medio oriente que posee cazas F-35, dándole una ventaja aérea superlativa con su capacidad de stealth haciendo casi imposible de detectar en los radares de sus adversarios.
Muchos sectores del establishment estadounidense y la opinión pública han pedido reevaluar las ventas de armas a Tel Aviv. En los últimos meses se han acrecentado las denuncias por los miles de civiles muertos en Gaza, y el Departamento de Estado ha afirmado que es probable que las Fuerzas de Defensa de Israel hayan usado armas estadounidenses en actos que violan el derecho internacional. Pero por el momento la administración Biden se ha mantenido firme en su decisión de proveer a Israel con el armamento que considere necesario.
Por su parte, el ministro de Defensa israelí Yoav Gallant afirmó que “la adquisición del tercer escuadrón F-35 refleja la fortaleza de la alianza estratégica entre Israel y Estados Unidos. Esta capacidad tiene un impacto significativo en escenarios tanto cercanos como lejanos. En [un] momento en el que algunos de nuestros adversarios pretenden socavar nuestros vínculos con nuestro mayor aliado, nosotros sólo fortalecemos aún más nuestra alianza”.
Israel continúa siendo una potencia militar regional, en no menor medida gracias al apoyo sustantivo que recibe de los Estados Unidos. Tanto en términos diplomáticos, como siendo su principal proveedor de sistemas de armas avanzados como el caza F-35, y todas las municiones necesarias para librar su guerra en Gaza.