La Comisión de Bolsa y Valores (SEC) de Estados Unidos aprobó la inclusión de un fondo cotizado en bolsa (ETF, por sus siglas en inglés) de Bitcoin al contado. La solicitud presentada por BlackRock y otros bancos de inversión ampliará el acceso de la criptomoneda más comercializada de todas en Wall Street.
La aprobación del ETF se da luego de una oposición de más de una década, ya que la primera vez que se propuso crear este instrumento fue en 2013. Sin embargo, cuando en junio del 2023, el banco de inversión BlackRock hizo su presentación, y posteriormente la jueza Neomi Ra del tribunal de apelaciones, quien calificaba a la denegación del ETF como “arbitraria y caprichosa”, falló a favor del instrumento, se generó una gran especulación acerca de la aprobación del instrumento por parte de los reguladores estadounidenses.
El día miércoles 10 de enero, finalizaba el plazo para dar el visto bueno al instrumento o volver a vetarlo. Esta vez, la SEC decidió autorizar al mismo, con la aprobación de 11 fondos para que comiencen a cotizar en bolsa el jueves 11 de enero, por primera vez en la historia.
Esta medida generó una gran expectativa en el mundo cripto, ya que este instrumento ampliará el acceso a este mercado, con la atracción de más inversores y liquidez. De acuerdo con el CEO de Binance, Richard Teng, “la aprobación ilustra un nuevo nivel de aceptación, madurez y generalización del mercado de las criptomonedas, proporcionando a la industria más credibilidad y potencial para una mayor innovación”.
Que es un ETF y cuales pueden ser sus implicancias para el Bitcoin
Un fondo cotizado o ETF es un instrumento financiero que se encuentra en la categoría de instituciones de inversión colectiva de gestión pasiva, ya que se trata de vehículos que replican activos subyacentes, como puede ser un índice de referencia de un mercado financiero -tal es el caso del SPY, que replica al S&P500, o el QQQ, que replica el Nasdaq-, o como puede ser un instrumento que replique materias primas, como el oro o el petróleo.
En el caso del Bitcoin, un ETF disponible en Wall Street tendrá múltiples efectos e implicancias. En primer lugar, es probable que aumente la confianza en la criptomoneda, debido a su regulación por parte de la SEC, aumentando los flujos de dinero en el mercado. En segundo lugar, la posibilidad de optar por comprar el ETF da mayor accesibilidad al mundo de las criptomonedas, sin la necesidad de crear una billetera en un exchange, sino simplemente comprando el instrumento en el mercado financiero como un activo más. Estas ventajas impactarían de manera positiva en el valor del Bitcoin según numerosos analistas.
Es importante destacar que, como ya planteamos, comprar un ETF de bitcoin no significa “comprar bitcoin”, ya que, en realidad, implica comprar un instrumento que replica el comportamiento de la criptomoneda, pero no la criptomoneda en sí. Sin embargo, el instrumento que ha sido autorizado es un ETF spot (al contado), lo que significa que el instrumento está vinculado al precio del activo y la compra del mismo se traduce en mayor demanda de Bitcoin. Es decir, si un inversor quiere entrar con 1.000 dólares, compraría 1.000 dólares de Bitcoin, pero en lugar de poseerlo en una billetera, lo gestionaría una de las firmas autorizadas.
De esta manera, siguiendo a “el Economista“, “el inversor no tiene directamente el bitcoin, ya que es la gestora la que se encarga de proporcionar la exposición a ese valor y garantizarlo”. En este sentido, el inversor puede seguir y visualizar la inversión como con cualquier otro posicionamiento en un bróker, evitando la necesidad de crear una cartera de criptomonedas o lidiar con la blockchain, a cambio del pago de una comisión.
Por el lado de las desventajas, se menciona como principal al aumento de la exposición de la criptomoneda, ya que si fracasa el ETF, eso impactaría de manera negativa en el mercado de las criptos.
Reflexiones Finales
La aprobación del Fondo Cotizado (ETF) de Bitcoin marca un hito significativo en el sistema financiero global. Este acontecimiento representa la primera instancia en la historia en la que la principal agencia reguladora del mercado de valores del mundo aprueba y respalda un vehículo de inversión que replica una criptomoneda, después de una década de rechazo. Queda por determinar la acogida que tendrá este nuevo instrumento entre los inversores de Wall Street y si contribuirá al próximo “halving” del bitcoin.
En su jornada inaugural en el mercado, no se observaron fluctuaciones significativas en su valor, que ya venía experimentando un ciclo alcista debido a las expectativas generadas por esta inminente decisión de la SEC.