El presidente uruguayo Lacalle Pou inició el pasado sábado su viaje oficial a China, donde fue recibido por Xi en búsqueda de “promover las relaciones amistosas entre los dos países”. El mandatario uruguayo se quedará en el país asiático hasta el sábado 25 de noviembre.
“China está lista para trabajar con Uruguay para tomar el establecimiento de una asociación estratégica integral como un nuevo punto de partida… y enriquecer la cooperación”, le expresó el presidente Xi Jinping a su homólogo uruguayo Luis Lacalle Pou en una reunión en el Gran Salón del Pueblo de Beijing, informaron medios estatales chinos el miércoles.
Lacalle Pou propuso por primera vez un acuerdo de libre comercio (TLC) con China en 2021, en búsqueda de oportunidades similares para sus exportadores a las que disfrutan Chile, Costa Rica, Ecuador y Perú, y para impulsar las exportaciones de materias primas, bienes industriales y tecnología.
En este caso y bajo el esquema del Mercosur, donde todos los países del bloque deben aprobar la celebración de acuerdos comerciales en conjunto, Uruguay enfrenta la priorización del resto de los países que quieren primero llegar a un acuerdo de libre comercio con Europa.
Esta no es la primera vez que Uruguay busca negociar un TLC por su cuenta, ya que estuvo a punto de firmar un TLC con Estados Unidos en 2006. En ese entonces, su gobierno finalmente rechazó el acuerdo por temor a ser expulsado del Mercosur si lo hacía.
Actualmente, Beijing no tiene preferencia arancelaria para la carne vacuna uruguaya, que representó el 67% de las exportaciones del país sudamericano a China en 2022. En dicho mercado existe un arancel del 12% sobre la carne, según datos de COMTRADE de Naciones Unidas.
Según un estudio realizado por el Instituto Nacional de Carnes de Uruguay en 2021 y compilado por Reuters, si China firma un TLC con Uruguay, la industria cárnica podría implementar un arancel preferencial del 0%, lo que reduciría los aranceles en $150 millones.
Durante este viaje, Xi y Lacalle Pou fueron testigos de la firma de documentos de cooperación en una variedad de sectores, incluidos la agricultura, la educación y la ciencia y la tecnología, así como de inspecciones aduaneras, lo que podría ser una gran ayuda para las exportaciones de Uruguay.