“China es un gran amigo de Níger; nunca podremos decirlo lo suficiente”, declaró el ministro de Economía y Finanzas nigerino, Ali Mahaman Lamine Zeine, en la ceremonia en la cual se anunció el acuerdo. A su vez, el embajador chino, Jiang Feng, manifestó que “esta firma demuestra la amistad… y la cooperación fructífera entre los dos estados”. La extracción se llevará a cabo por la empresa estatal China National Petroleum Corporation (CNPC, por sus siglas en inglés).
El acuerdo es para extraer petróleo en Agadem, el campo petrolero más grande del país. Para ello, se construyó un oleoducto que cruza hasta Porto Novo, en Benín. La construcción del oleoducto comenzó en 2019 y finalizó en 2023, pero hasta se prevé que arranque a estar operativo en mayo de este año. La tubería tiene un total de 1.980 kilómetros.
A partir de esto, Níger se transformará en un nuevo exportador petrolero del continente africano. Previo al acuerdo, una joint venture liderada por la CNPC desarrollaba el campo de Agadem, pero únicamente para ser enviado a la refinería en Zinder y suplir con la demanda interna de petróleo en Níger. La refinería procesaba 20 mil barriles por día, entre diésel, petróleo y gas licuado de petróleo. Una gran parte iba destinado a las fuerzas armadas.
Hablando de las fuerzas armadas, este acuerdo llega en un contexto en el cual la junta militar, que gobierna Níger desde mediados de 2023, ha reformulado su política exterior y su política de seguridad. Luego de cortar lazos con Francia y luego con Estados Unidos, desde Niamey buscan recursos para modernizar sus tropas y así combatir el extremismo islámico. Cabe aclarar que la región del Sahel fue la peor en cuanto a ataques terroristas en 2023.
Para combatir este problema, en conjunto con Burkina Faso y Mali, que también son gobernados por juntas militares, han creado la Alianza del Sahel, y apuntan a una política exterior conjunta en relación a la seguridad y defensa de sus países. Al alejarse de las potencias occidentales para que los prevean de seguridad, tanto Rusia como China son bienvenidos, y la influencia de estos dos países se empieza a extender.
Aunque los países africanos se refugian más en el Kremlin para su seguridad, las inversiones chinas generan una gran cantidad de ingresos en divisa extranjera que estos reinvierten en sus propias fuerzas armadas, generalmente. Esto ha reemplazado la estrategia previa de China con África, que era otorgar préstamos a baja tasa. Actualmente, hay una buena cantidad de empresas petroleras estatales chinas que están llevando a cabo proyectos en diferentes países: Argelia, Camerún, Chad, Egipto, Gabón, Sudán del Sur, entre varios otros.