Este miércoles, Rafael Grossi, el argentino que encabeza el Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA) se dirigió a la Junta de Gobernadores de la organización, con sede en Viena, para dar declaraciones sobre el estado del desarrollo nuclear de Irán.
En esta línea, el director de la OIEA aseguró que el gobierno iraní accedió a detener el enriquecimiento de uranio al 60%, cercano al porcentaje de 90% necesario para el uso militar.
“Solicité a la República Islámica de Irán que actuara con moderación. No solo eso, sino también, si fuera posible, que dejara de aumentar sus reservas de uranio enriquecido al 60 %. Debo decir que mi solicitud fue aceptada por Irán“, sostuvo Grossi en su discurso.
La semana pasada, Rafael Grossi viajó a Teherán para visitar instalaciones nucleares y reunirse con el presidente iraní, ante la preocupación internacional de que la República Islámica adquiera armas de destrucción masiva, en el marco de la escalada en Medio Oriente.
Luego de su viaje a Irán, el Director de la OIEA y ex Embajador de la República Argentina en Austria, le comunicó a la prensa que el centro de investigaciones de Parchin no es considerado una instalación nuclear, a contramano de las declaraciones del gobierno israelí, quien se refirió al lugar como un elemento del programa nuclear iraní.
Asimismo, durante su estadía en Teherán, Grossi se reunió personalmente con el presidente iraní, y le solicitó al gobierno que limitara sus reservas de uranio enriquecido, en medio de los esfuerzos de occidente por presionar a Irán. De este modo, se le encomendó a la OIEA la elaboración de un informe integral sobre el desarrollo nuclear de la República Islámica.
En tanto, el director del organismo resaltó que Irán debe profundizar su cooperación para que la OIEA pueda verificar la naturaleza pacífica de su programa nuclear.