Este viernes, Bashar al-Assad, presidente de Siria, asistió a la cumbre de la Liga Árabe luego de ser reincorporado tras 12 años de aislamiento regional. Por ello, el presidente sirio describió la reunión como una ‘’oportunidad histórica’’ para abordar las crisis regionales.
Siria fue suspendida de la Liga Árabe en 2011 a causa de la brutal represión del gobierno de al-Assad hacia los manifestantes civiles, lo que desencadenó su guerra civil que ha dejado un saldo de casi medio millón de muertes y 23 millones de personas desplazadas de sus hogares.
Así, tras más de una década de suspensión, el presidente sirio fue recibido con un cálido abrazo por el príncipe heredero Mohammed bin Salman, quien, posteriormente, declaró que “el regreso a la Liga Árabe concluye el fin de su crisis“, terminando una década de hostilidades entre ambos países desde el inicio de su guerra civil.
“Espero que marque el comienzo de una nueva fase de acción árabe en busca de solidaridad entre nosotros, de paz en nuestra región, desarrollo y prosperidad en lugar de guerra y destrucción“, señaló al-Assad. Asimismo, reiteró su acercamiento con sus vecinos afirmando que “el pasado, presente y futuro del país es el arabismo“, sin mencionar a su aliado persa, Irán, país que ha resultado fundamental para mantener su posición de poder en Siria.
El mandatario sirio también apuntó contra Turquía advirtiendo sobre el “peligro del pensamiento expansionista otomano“, que actualmente sigue financiando milicias rebeldes y ha intervenido militarmente en el norte del país.
“Es importante dejar los asuntos internos a la gente del país, ya que son quienes mejor pueden gestionar sus propios asuntos“, dijo al-Assad en la cumbre del foro árabe, mientras que en Siria miles de manifestantes marchaban al grito de “el criminal Assad nunca representa a Siria“.
Por el otro lado, Arabia Saudita y sus aliados han dejado de lado sus intenciones de derrocar al gobierno de Damasco, priorizando la estabilidad en la región. Según el príncipe Mohammed bin Salman, Arabia Saudita “no permitirá que nuestra región se convierta en un campo de conflictos“ afirmando que se ha pasado página a “años dolorosos de lucha“.
No obstante, Estados Unidos mantiene firme sus sanciones contra Siria e insta a sus aliados árabes a que negocien avances democráticos a cambio de su acercamiento. La comunidad internacional ha criticado las elecciones presidenciales sirias de 2021, las cuales resultaron en una victoria de al-Assad con más de 95% de los votos.
De toda maneras, aunque sus vecinos no insistan en un proceso de democratización, le exigen indirectamente ponerle fin a la producción de captagón, una poderosa anfetamina que se expande por todo medio oriente hasta Europa presuntamente controlada por Maher al-Assad, jefe de la Cuarta División del Ejército Árabe Sirio y hermano del presidente.
Por otra parte, Arabia Saudita ha cambiado su política exterior pasando de ser un leal aliado estadounidense en la región a tomar un rol importante como actor internacional, lo cual se ha demostrado en el restablecimiento de relaciones diplomáticas con su histórico enemigo, Irán, en la mediación del conflicto en Sudán y en el intento de participación en potenciales negociaciones ruso-ucranianas.
Por esto último, Volodormir Zelenski, presidente de Ucrania, fue invitado por el Reino saudita como un invitado especial a la reunión. En este contexto, el presidente ucraniano solicitó a los delegados apoyo en la fórmula de paz ucraniana y agradeció a Arabia Saudita su mediación en un intercambio de prisioneros con Rusia el año pasado.
“Reafirmamos la disposición del reino de continuar los esfuerzos de mediación entre Rusia y Ucrania, y de apoyar todos los esfuerzos internacionales destinados a resolver la crisis de manera política de manera que contribuya a lograr la seguridad“, declaró el príncipe heredero saudita ante Zelenski. Cabe resaltar que los países árabes han elegido mantener su neutralidad en el conflicto ruso-ucraniano a pesar de la fuerte presión de Occidente para aislar económicamente a Rusia, un miembro colega de la OPEP+.
Por ello, Zelenski ha sido muy crítico con la posición que han tomado varios países de la Liga Árabe. “Lamentablemente, hay quienes en el mundo y aquí, entre ustedes, hacen la vista gorda ante esas jaulas y anexiones ilegales“ dijo a los delegados en la cumbre.
Durante el encuentro, también se discutió sobre el futuro de Sudán y las posibilidades para terminar el conflicto. El príncipe heredero celebró el acuerdo alcanzado por las diferentes facciones y añadió que “esperamos que las conversaciones de Jeddah ayuden a alcanzar un alto el fuego eficiente en Sudán“.