Recientemente, dos propuestas de transferencia de equipos de defensa a la Argentina han ingresado al Congreso de Estados Unidos para su análisis y potencial aprobación. Las propuestas en cuestión suponen la puesta en marcha de, por un lado, una operación de venta de hasta 38 aviones de combate F-16 “Fighting Falcon”, actualmente en poder de Dinamarca, y, por el otro, una transferencia de cuatro aviones de patrulla marítima P-3 “Orion”, que se encuentran en poder de Noruega. Es importante destacar que esto no significa que Argentina haya decidido finalmente realizar estas adquisiciones, sino que es un primer paso para continuar con las correspondientes negociaciones.
Según distintos medios especializados, la transferencia de aviones de combate F-16 de Dinamarca sería por un valor aproximado de 338 millones de dólares. Se trata de los modelos más antiguos del avión caza norteamericano, aunque cabe señalar que estos fueron modernizados en el año 2021 con el paquete denominado Mid Life Upgrade (MLU). En concreto, se prevé la transferencia de hasta seis F-16 de la versión “Block 10″ y hasta 32 aviones “Block 15″.
Desde el 29 de noviembre de 2015, nuestra Fuerza Aérea carece de aviones de intercepción específicos, con lo cual se han estado utilizando para ese fin otras aeronaves disponibles en el inventario como el cazabombardero A4AR “Fightinghawk” o el avión de entrenamiento avanzado IA 63 “Pampa”, que fueron adquiridas hace tiempo y, en realidad, deben cumplir con otros propósitos.
La oferta de los F16 de segunda mano compite también con otros importantes oferentes internacionales. En primer lugar, China ha puesto sobre la mesa la posibilidad de adquirir entre 12 y 24 aviones caza F17 “Thunder”, coproducidos con Pakistán, los cuales cuestan entre 25 y 50 millones de dólares cada uno, dependiendo de su equipamiento. La oferta china consiste en financiarlos a 15 años, convirtiéndose así en la más rentable de todas las propuestas recibidas. Además, India ha ofrecido su caza supersónico denominado HAL “Tejas” MK2, conformando un paquete de venta de 12 a 18 aeronaves con un costo aproximado de 30 millones de dólares por unidad.
Además del precio de cada aeronave, se deben tener en cuenta los costos adicionales de entrenamiento de las tripulaciones y mecánicos, del armamento que van a portar y del equipo de apoyo en tierra, entre otros aspectos.
Argentina ha optado mayormente por adquirir equipamiento y tecnología militar occidental, puesto que una compra fuera de este hemisferio tendrá sin dudas importantes implicaciones geopolíticas. Más allá de ello, la Fuerza Aérea Argentina necesita contar con cazas de intercepción por razones vinculadas con la defensa nacional y la seguridad aérea.
Contar con este tipo de equipamiento aéreo permite disponer de una capacidad efectiva para proteger el espacio aéreo de nuestro país y mantener la soberanía frente a posibles amenazas, tales como incursiones aéreas hostiles, reconocimiento aéreo de tercero actores y vuelos ilegales de contrabando o comercio ilícito. Por ello, la falta de aviones de intercepción específicos desde 2015 ha sido una grave preocupación para la defensa del país.
Las tres aeronaves ofrecidas son polivalentes, en el sentido de que pueden desempeñar diversas funciones, y sus principales características comparativas son las siguientes:
Avión | Velocidad (km/h) | Alcance | Techo (mts) | Radar | Cañones | Capacidad portante | Condición | Países usuarios | Fabricante | Costo por unidad (millones de U$S) |
F16 MLU | 2.414 | 550 km | 18.288 | Doppler | 1 de 20 mm | 11 anclajes | 2da Mano | 25 | EEUU | 8/15 |
JF 17 Block 3 | 1.960 | 1.352 km | 16.920 | Control de tiro | 2 de 23 mm | 7 anclajes | Nuevo | 3 | China | 25/50 |
TEJAS MK2 | 2.138 | 850 km | 15.000 | Doppler | 2 de 23 mm | 8 anclajes | Nuevo | 1 | India | 20/30 |
Fuente: Diseño de Guillermo Castellanos con datos de Lockheed Martin, Airforce Technology y Hindustan Aeronautic Limited
En conclusión, la reciente propuesta de venta de aviones de intercepción para Argentina representa un importante avance en el esfuerzo por recuperar la capacidad de defensa aérea del país. Las opciones a considerar incluyen la posible adquisición de aviones de combate a seleccionar entre los modelos F-16 “Fighting Falcon”, JF 17 “Thunder” y HAL “Tejas”.
La adquisición de cazas de intercepción es de vital importancia para la defensa nacional y la seguridad aérea de Argentina. Estos aviones permitirán proteger el espacio aéreo del país, interceptar posibles amenazas, controlar el tráfico aéreo y enfrentar situaciones como incursiones hostiles, reconocimiento de terceros actores y vuelos ilegales.
En última instancia, la adquisición de aviones de intercepción es una oportunidad significativa para fortalecer la seguridad y la capacidad de respuesta de Argentina ante posibles escenarios de amenazas aéreas. También, servirá para proteger los intereses nacionales y contribuir a mantener la estabilidad en la región.
La decisión que se tome sentará las bases para el futuro de la defensa aérea argentina y su posición en el escenario global de seguridad. Por lo tanto, será crucial realizar una evaluación minuciosa y cuidadosa de las opciones disponibles de modo de asegurar una elección que beneficie al país y se alinee con sus objetivos estratégicos de defensa.