El Tribunal de Apelaciones de La Haya ordenó el lunes al gobierno que bloquee todas las exportaciones de piezas de aviones de combate F-35 a Israel por temor a que este armamento sea utilizado por las fuerzas israelíes en violación del derecho internacional humanitario en el conflicto en curso en la Franja de Gaza.
“El tribunal ordena al Estado que ponga fin a la exportación de piezas de F-35 a Israel en un plazo de 7 días“, dijo el tribunal; y agregó que “es innegable que existe un claro riesgo de que las piezas exportadas del F-35 se utilicen en graves violaciones del derecho internacional humanitario“.
La decisión tiene lugar en el marco de la visita del primer ministro neerlandés, Mark Rutte, a Israel. Cabe recordar que Rutte se ha enfrentado a críticas a nivel interno por su posición pro israelí frente al conflicto con Hamas, acusándoselo de tomar esta postura con el fin de aumentar las posibilidades de reemplazar a Jens Stoltenberg como secretario general de la OTAN.
Tras darse a conocer el fallo del tribunal, el gobierno de los Países Bajos apelará ante la Corte Suprema, argumentando que debería ser el Estado el que establezca la política exterior, no un tribunal.
El ministro de Comercio, Geoffrey van Leeuwen, asegurando que los aviones de combate son claves para la seguridad de Israel, dijo que era demasiado pronto para decir si la prohibición de exportar piezas de su país tendría algún impacto concreto en los suministros generales a Israel.
“Somos parte de un gran consorcio de países que también están trabajando junto con Israel. Hablaremos con los socios sobre cómo lidiar con esto“, expresó el minsitro. Los Países Bajos albergan uno de varios almacenes regionales de piezas de F-35 de propiedad estadounidense. Asimismo, un comunicado del gobierno sentenció que “esa cooperación es importante para la propia seguridad nacional de los Países Bajos“.
El fabricante del F-35, Lockheed Martin, emitió un comunicado señalando que estaba evaluando el impacto del fallo del tribunal neerlandés en su cadena de suministro, pero agregó que estaba “listo para apoyar al gobierno de Estados Unidos y sus aliados según sea necesario“.
El ministro del gabinete israelí, Benny Gantz, dijo en sus redes sociales que, en el marco de su reunión con el primer ministro neerlandés, acogió con beneplácito la decisión de apelar el fallo del tribunal. “Yo… reiteró que la decisión de la corte dañará el imperativo global e israelí de luchar contra el terrorismo“, publicó Gantz en X.
Las organizaciones defensoras de los derechos humanos, Oxfam Novib, Pax Nederland y The Rights Forum, presentaron el caso en diciembre. En un primer fallo, un tribunal inferior no llegó a ordenar al gobierno holandés que detuviera las exportaciones, a pesar de que dijo que era probable que los F-35 contribuyeran a violaciones del derecho humanitario.
No obstante, aunque el tribunal inferior dictaminó que el Estado tenía un alto grado de libertad para sopesar cuestiones políticas vinculadas a la decisión sobre las exportaciones de armas, el Tribunal de Apelaciones de La Haya sentenció que tales preocupaciones no superaban el claro riesgo de violaciones del derecho internacional.
Los Países Bajos “deben prohibir la exportación de artículos militares si existe un riesgo claro de violaciones graves del derecho humanitario de la guerra“, dijo el tribunal; y añadió que “Israel no tiene suficientemente en cuenta las consecuencias para la población civil cuando lleva a cabo sus ataques“.