El 3 de diciembre de este año, el pueblo venezolano se manifestó a favor del argumento de Venezuela respecto de los derechos en la región de Esequibo, a través de una consulta popular en la que participaron más de 10 millones de venezolanos. Luego del referéndum, el presidente de Guyana, Irfaan Ali, y Nicolás Maduro se reunieron en Kingstown para aliviar el enfrentamiento por el territorio en reclamo. Sin embargo, todo indica que la reunión no cumplió su objetivo, en vistas de los acontecimientos recientes.
Venezuela ha optado por enviar a más de 5.000 militares a su litoral caribeño oriental después de que Guyana coqueteara con recibir a un buque de guerra del Reino Unido enviado al Caribe, desencadenando así una controversia territorial en torno al Esequibo.
“Venezuela tiene derecho a defenderse, a la tranquilidad, a la paz”, dijo Maduro el jueves en la televisión estatal, al tiempo que acusó a Guyana de violar un acuerdo firmado hace dos semanas para continuar las conversaciones sobre el territorio sin el uso de armas. “No aceptamos provocaciones, amenazas de nada ni de nadie”.
En 2018, Venezuela adoptó una medida similar para interceptar embarcaciones vinculadas a Exxon Mobil Corp en la misma zona. Las acciones actuales, que el presidente Maduro describe como la primera fase de un plan más extenso, podrían intensificar la disputa latente entre los países vecinos por el territorio del Esequibo. Esta región, aproximadamente del tamaño de Florida, está bajo control de Guyana pero ha sido reclamada por Venezuela desde el siglo XIX.
Según Neil Villamizar, comandante de la Armada venezolana, se desplegaron 5.682 militares de diversos componentes de las fuerzas armadas del país, acompañados por tres buques patrulleros oceánicos, tres buques multipropósito, siete lanchas lanzamisiles, ocho vehículos anfibios y más de 20 aviones de combate, incluyendo 12 Sukhoi.
Aunque las fuerzas desplegadas representan aproximadamente el 4% de la fuerza militar estimada de Venezuela, este número coincide con la cantidad estimada de combatientes en Guyana. Sin embargo, el equilibrio de poder podría cambiar si los aliados de Guyana intervienen.
A principios de este mes, el Reino Unido reafirmó su respaldo a Guyana luego de la renovación de la reclamación fronteriza de Venezuela sobre la región del Esequibo. Después de la visita de David Rutley, ministro británico para las Américas, el Caribe y los Territorios de Ultramar, Gran Bretaña desplegó un buque de guerra de la Royal Navy llamado HMS Trent en Guyana para participar en ejercicios conjuntos.