De acuerdo a informes de inteligencia del gobierno ucraniano, al menos unos 30 soldados de Pionyang habrían sido eliminados o heridos en combate, a dos meses de que Kiev y Seúl acusaran a Corea del Norte de enviar tropas a Rusia. Por su parte, el Pentágono confirmó que hubo bajas norcoreanas, pero no dió una cifra.
Desde que se reportó el despliegue de soldados provenientes de Corea del Norte en el mes de Octubre, ni Moscú ni Pionyang dieron información al respecto, mientras que Occidente advirtió que el hecho representaba una peligrosa extensión del conflicto. En tanto, numerosas voces apuntaron contra la falta de experiencia en combate de los soldados desplegados, sugiriendo que la nueva mano de obra de Rusia sería utilizada para tareas logísticas y de apoyo.
Sin embargo, dicha postura fue reconsiderada luego de que Estados Unidos y Ucrania confirmaran que tropas norcoreanas habían entrado en combate con soldados ucranianos. Según señaló el Pentágono, es probable que no hayan sido desplegados del lado ucraniano de la frontera, sino que estuvieran siendo empleados en funciones de infantería alrededor de la región de Kursk, que Rusia está tratando de recuperar.
Este fin de semana, circularon en internet imágenes de presuntos soldados norcoreanos en el campo de batalla, mientras Zelensky asegura que una cifra considerable de soldados se han unido a los rusos en Kursk y que por el momento no se han detectado en ningún otro sector del frente, pero esto podría cambiar. En tanto, fuentes occidentales estiman que habría más de 10.000 soldados norcoreanos en la zona.